Las comunidades de Los Lagos y Panguipulli han asistido desde junio de este año en
talleres participativos con el objetivo de entregar sus comentarios e incluirlos para el
Informe Técnico Justificatorio que se presentará ante el Ministerio del Medio Ambiente.
Este 5 de diciembre se realizó la jornada de validación de este proceso y el 11 de
diciembre se hará la entrega oficial de éste ante el Ministerio del Medio Ambiente.
Desde junio del presente año se han realizado siete talleres participativos en el territorio
con el objetivo de recoger los puntos de vista de las y los habitantes que hacen uso y
tienen influencia en el río San Pedro y, de esta manera, construir en conjunto los
contenidos del Informe Técnico Justificatorio que permitirá solicitar la declaratoria oficial
de protección para la cuenca que abastece de agua dulce a Valdivia, Los Lagos y poblados
aledaños.
La propuesta de protección busca garantizar que los proyectos y actividades que se
realicen en las aguas del río San Pedro sean respetuosos y compatibles con el cuidado del
medio ambiente. Esto corresponde a un triunfo de la comunidad, como resultado de 16
años de oposición y movilizaciones ciudadanas, que logró el retiro del proyecto de una
central hidroeléctrica que se pretendía construir en el río. Frente a esta noticia la
comunidad inició un trabajo de concientización sobre la urgencia de proteger al río San
Pedro mediante una figura de conservación oficial.
Aldo Retamal, alcalde de Los Lagos, explicó que “la comunidad laguina quiere conservar su
territorio, pero también desarrollarlo productivamente. Se nos viene seguir fortaleciendo
la participación y la democracia. La gobernanza local va a tener sentido en virtud de que la
comunidad se involucre en estos cambios. Son cambios culturales que van mucho más allá
de uno o dos años, pero tenemos que generar los inicios. El trabajo realizado para lograr
el ITJ fue gracias al trabajo en equipo de los municipios de Panguipulli y Los Lagos, el
Equipo Núcleo, la mesa ciudadana por la defensa del río San Pedro, la comunidad y todas
las organizaciones que generaron el movimiento social por la defensa de la cuenca. Esto
demuestra que es posible generar modelos y estrategias de conservación para nuestro
territorio”.
Pedro Burgos, alcalde de Panguipulli, señaló que “estamos seguros de que todo el trabajo
realizado para la protección de la cuenca del río San Pedro es un tremendo avance en
materia de conservación, pues el Informe Técnico Justificatorio ya elaborado, servirá de
base para solicitar una nueva figura de protección ante el Ministerio del Medio Ambiente.
Considerando el nuevo contexto nacional con la ley SBAP aprobada, en este sentido es
que es esperable que se logre una protección efectiva y por la que debemos seguir
trabajando para generar una gobernanza aplicable con todas y todos los actores del
territorio”.
Paulina Ramos, encargada de medio ambiente de la Municipalidad de Panguipulli, indicó
que “a través del trabajo comunitario tenemos que establecer una estrategia de bajada de
la información hacia el territorio. Necesitamos colaboración de la comunidad y de las
instituciones que están detrás, tanto de las seremías como de las ONGs o fundaciones y
también desde los municipios locales para que se pueda levantar este proceso con el
apoyo de todos los actores. Es muy importante tener presente que las y los propietarios
que están asociados al borde del río también tengan en claro cuál es la figura que ahora se
viene para esta área protegida y a esta figura no hay que tenerle en ningún caso miedo si
no que solo tenemos que pensar que está asociada a la conservación, la preservación y al
desarrollo más sustentable de esta cuenca”.
Mauricio Hiriart, encargado de la unidad de pesca de la Municipalidad de Panguipulli, dijo
que “en cuanto a la pesca recreativa existen leyes que ayudan a proteger los ríos a nivel
nacional, pero en el río San Pedro no tenemos las herramientas necesarias para poder
hacer efectiva esta protección. Es importante proteger oficialmente al río porque,
independiente del nombre que se le ponga, va a permitir tener una fiscalización más
intensiva y poder aplicar las leyes que ya tenemos. Vamos a poder llevar a la práctica lo
que el papel dice. Teniendo un río protegido, no olvidemos que el río San Pedro y el
Mañío, por una resolución de la subsecretaría de pesca, tiene una protección que sólo se
permite la pesca con mosca y devolución, pero hay que hacer cumplir y fiscalizar”.
La jornada de validación de este informe se llevó a cabo mediante un seminario abierto a
la comunidad el día 5 de diciembre en el Salón Auditorium de la Ilustre Municipalidad de
Los Lagos. Se presentaron temas como límites, objetos de conservación, amenazas,
modelo de gobernanza y zonificación del área a proteger, con el objetivo que los actores
del territorio puedan validar el informe que se presentará ante el Ministerio del Medio
Ambiente el próximo 11 de diciembre.
El río San Pedro destaca por ser actualmente el cauce más biodiverso de Chile y por no
estar gravemente intervenido por ningún proyecto industrial o hidroeléctrico. En este
lugar habitan varias especies endémicas y microendémicas, es decir, especies cuya
distribución está restringida a un área en particular y no se encuentran en ninguna otra
parte en el mundo, como por ejemplo, el toyo de agua dulce, que sólo se encuentra en la
cuenca del río Valdivia. Muchas especies que habitan el río se encuentran en estado de
conservación vulnerable o en peligro de extinción, según las categorías establecidas por el
Ministerio del Medio Ambiente. En la zona a proteger, además, se encuentran fósiles que
forman parte del patrimonio paleontológico de Chile y pasó a la historia por el
“Riñihuazo”, la hazaña de heroicos trabajadores que evitaron la inundación de Los Lagos y
Valdivia después del gran terremoto de 1960.
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