Durante la madrugada de este lunes 4 de agosto, el propietario de la distribuidora de gas «Mykar» en Río Bueno, Miguel Cárdenas, fue víctima de un robo en su domicilio y local comercial. Delincuentes sustrajeron dinero en efectivo, equipos celulares y cilindros de gas, todo mientras el afectado se encontraba fuera de la ciudad. A pesar de las pérdidas, Cárdenas optó por no presentar una denuncia formal, argumentando la falta de pruebas como registros de cámaras de seguridad para facilitar la investigación policial.
Un nuevo hecho delictual afectó a un comerciante de la comuna de Río Bueno, en la Región de Los Ríos. Se trata de Miguel Cárdenas, dueño de la distribuidora Lipigas «Mykar», ubicada en la intersección de las calles Carlos Condell y Serrano, quien durante la madrugada de este lunes 4 de agosto sufrió la sustracción de diversas especies desde su propiedad.
Según relató el propio afectado, el ilícito se habría producido en el lapso en que él se ausentó de su domicilio para viajar a la ciudad de Osorno. «Yo generalmente el día lunes voy a buscar a mi mamá a Osorno y en ese lapso fue que ellos entraron», explicó Cárdenas. Al regresar, cerca de las 07:30 de la mañana, se percató de que desconocidos habían forzado la puerta de su habitación para cometer el delito.
Los antisociales sustrajeron dos teléfonos celulares, avaluados en $100.000 cada uno, además de una suma aproximada de $300.000 en dinero en efectivo. Junto con esto, se llevaron cinco cilindros de gas vacíos que el comerciante mantenía en una jaula de almacenamiento. Las pérdidas, que el propio Cárdenas califica como un golpe a sus «herramientas de trabajo», superan los $500.000, sin contar el valor de los cilindros.
Lo más llamativo del caso es la decisión de la víctima de no interponer una denuncia ante las policías. Consultado sobre esta determinación, Cárdenas confirmó que no se acercó a Carabineros. «La verdad, de repente ellos poco pueden hacer. O sea, pueden hacer mucho, pero a la vez también pueden hacer poco, porque no hay evidencia», afirmó. El comerciante lamentó la falta de cámaras de seguridad en su propiedad y en las de sus vecinos, lo que, a su juicio, dificulta cualquier investigación. «No hay una cámara física porque los vecinos ahí, cuando me robaron la vez anterior, pregunté, nadie tiene cámara. Entonces, ese día él lo iba a molestar por algo que no se iba a poder concretar», sentenció.
Este es el segundo robo que sufre el propietario de «Mykar». La vez anterior, los delincuentes se llevaron un cilindro de gas. Como medida de seguridad, Cárdenas informó que ya ha contratado personal para reforzar la seguridad de su local y que durante la jornada de este martes se procederá a la instalación de un sistema de cámaras de vigilancia.
